Día
11-3-2016. Viernes
Buscamos
y leemos: Sabiduría 2, 1ª.12-22
Estamos ante un libro muy
interesante. El libro de la Sabiduría es, cronológicamente hablando, el último
del Antiguo Testamento. Con él nos situamos prácticamente en los umbrales del tiempo
de Jesucristo y en plena época de difusión de la lengua y la cultura griega.
Al
leer el texto de la liturgia de hoy sorprende su semejanza con los llamados
“cantos del Siervo de Yahvé” del Deuteroisaías y con los salmos 22 y 69.
También se aprecia la semejanza con la actitud de estos impíos con la de los
judíos y paganos en la pasión de Cristo. Esto llevó a muchos Padres a
interpretarlo directamente con el Mesías.
En
su sentido literal el texto se refiere a los justos que tenían que soportar la
persecución y el desprecio por parte de judíos apóstatas y paganos hostiles.
Pero aquellos justos vienen a ser el tipo de todo justo que sufre y, por
supuesto, del Justo por excelencia, que no es otro sino Jesucristo.
Nos
puede sorprender que se hable aquí del “Hijo
de Dios”, pero es que en Antiguo Testamento se aplica a Israel y a los
israelitas. En el libro de la Sabiduría se tiende a reservarlos para los
justos.
Termina
con ese juicio sobre los razonamientos de los impíos, que se equivocan. Su
error proviene de su maldad. No llegaron a la luz porque sus obras eran malas. “No conocen los secretos de Dios”.
Sí,este libro ha sido escrito en griego; su autor un judío helenista lleno de fe en un Dios único, Soberano y Creador; orgulloso por pertenecer a un pueblo santo e irreprensible . La exégesis asegura que era un judíao de la Diáspora y cita la Escritura siguiendo a los Setenta. La fecha exacta de su composición no se conoce; pero, a través de los libros, la sitúan entre el 180-63 a. de C.Llama la atención su cristología del capitulo II´.
ResponderEliminarDespués de una exhortación para vivir de acuerdo con la justicia( Sab1,1-15); los impíos, no restán para nada de acuerdo; ellos buscan el placer en todo y eliminan, incluso con violencia todo obstáculo que se lo fuera a impedir, (v1) razonan equivocadamente, se engañan, (v21). Los impíos son los hebreos apóstatas de la comunidad de Jerusalñen que se han unido a los paganos y persiguen a sus hermanos que permanecen fieles al Dios de la Alianza. Por su conducta, estos "justos", irreprensibles, constituyen una comunidad insoportable y tratan de eliminarlos.(vv18-20)
El "resto" de Israel vive profetizando. Jesús es el único Justo verdadero,(v19), condenado a muerte infame(v20): Por Él todos seremos constituídos"justos".