SED COMPASIVOS

SED COMPASIVOS COMO VUESTRO PADRE

Tanto la oración de Daniel como el Evangelio insisten en el Corazón de Dios, como base de todo lo que podamos vivir como criaturas necesitadas, que reconocen su pecado y buscan la misericordia y compasión de Dios. “Nosotros, pecadores; Tú, Dios, santo”

Por eso la forma de alcanzar la misericordia es siendo nosotros así de misericordiosos con los otros, que imitemos al Corazón amoroso de Dios. Y eso no sólo en las obras. También en los mismos juicios ocultos, o las palabras pronunciadas. Porque la medida que queremos que tengan los demás con uno mismo vine dada por la medida que nosotros tenemos con ellos