MALDITOS Y BENDITOS
Llevo varios días sin comentario litúrgico; gajes del oficio, y que no se puede estar en Misa y repicando. Y todavía puede repetirse dentro de una semana. La Cuaresma es tiempo fuerte de trabajo pastoral, y cuesta su tiempo cada rato de ordenador.
Hoy –Jueves 2º de Cuaresma- tenemos de entrada una declaración de maldición y otra de bendición. El que resulta maldito, destruido, estéril, tirado en la cuneta…, es el que se apoya sólo en lo humano, las fuerzas humanas, y la realidad humana que tiene tantas veces alrededor. Bien lo sabemos, y es muy frecuente oír: No me fío de nadie”.
Por el contrario es una bendición la del que se acoge a Dios, porque su vida tiene entonces esa lozanía del árbol plantado junto a la acequia, que sus hojas son hermosas, verdes y jugosas.
Y como un ejercicio práctico que confirma, viene la parábola de Jesús: el rico que se apoya en su riqueza, sus vestidos finos, sus banquetes, su creer no necesitar de nadie. El pobre, que se muere de hambre, miseria y llagas.. Pero cuando muere, vienen por el los ángeles. En cambio, al rico, simplemente lo entierran.
Y viene la segunda parte de la vida: el que puso su confianza en sus riquezas, está maldito. Desesperado. Sufriendo. No sembró y no tiene para recoger. El pobre, que no tenía donde caerse muerto, goza. Y ahora se acuerda el rico de que necesita… Siquiera de una gota de agua del pobre… Pero el rico no había sabido construir puente para poder pasar desde el sitio del pobre hasta él. Y no pudo ser ¡ni la gota de agua! Esa es la maldición del egoísta, del reconcentrado sobre sí, como si fuera el dios de sí mismo. Cuando no se sabe escuchar ni a la ley ni a los profetas, ni a Cristo ni a la Iglesia,, ni abrirse a los demás, de esos polvos salen esos lodos.
El que se apoya SÓLO en lo humano es aquel que SIEMPRE está rechazando apoyarse en Dios, porque piensa que no le necesita, o bien porque no cree en el, o bien porque no le conoce todavía y no sabe todavía esa verdad.
ResponderEliminarRealmente sin Dios no somos nada, porque Dios es la fuente de todo. De el procede todo bien, mientras que lo malo tiene una raíz, llamada pecado. Por causa del pecado, Cristo sufre una dolorosa pasión, y por nuestra causa fue crucificado en tiempo de Poncio Pilato, Padeció y fue sepultado...pero resucitó al tercer día según las Escrituras.
Ahora pues, si crees en Jesucristo, rechaza el pecado, y hazte justo por medio de la sangre de Cristo.
HOY ES EN DIA EN QUE TE GUSTARIA SER POBRE .PERO NO ES HACIN,UNO TIENE VIENES ,Y QUE PASA YA NO TE TIENES QUE CONBRERTIR PUES NO LO DUDES ,,,,
ResponderEliminar¡Cuánto agradezco tus participaciones en el blog! Sigue haciéndolo, que me haces mucho bien.
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