miércoles, 26 de noviembre de 2014

26 novbre.: LA PERSEVERANCIA EN EL BIEN

Ni un cabello perecerá
        Juan tiene de nuevo una visión del Cielo [Apoc15, 1-4], “definido” con expresiones fantásticas de cristal trasparente y con “mar de fuego” (que indica centelleo de estrellas).  Y allí “siete ángeles” para realizar el proyecto de Dios, que salva a los suyos:
        - los que han vencido a la bestia, a su imagen y a la cifra de su nombre: otra vez referencia al Imperio Romano, los innumerables mártires, que llevan “arpas que Dios les ha dado”: radiantes, pues, y resplandecientes.
        “Cantaban el canto de Moisés” (primer libertador de Israel, contra los egipcios). [Las ideas de ese canto son: 1) Dios actúa prodigiosamente, 2) derrotando a Egipto  3) Los enemigos quedan espantados, 4) y Dios da a su Pueblo la Tierra de Promisión.
        Cantaban también el “Canto del Cordero”: el definitivo libertador, que libra por su Sangre a los hombres, y crea un “nuevo Pueblo”, que es la Iglesia.
        Es el Cántico de los triunfadores de la bestia: los mártires, la Iglesia, que reconocen en “el Cordero” honores divinos. Es un canto de adoración, de triunfo final, que reconoce la voluntad de Dios, santísima y justísima, que no deja vencer al mal, e invita a observar los mandamientos de Dios y así glorificar su Nombre. 
          Grandes y admirables son tus obras, Dios soberano de todo, será el estribillo con que el coro litúrgico remarcará en el Salmo esa maravilla del triunfo de Dios. Porque Dios va a triunfar, a pesar de todas las influencias negativas que van a darse en la tierra.
          El Evangelio (Lc 21, 12-19) las va enumerando en un lenguaje de “final”: “Os echarán mano, os perseguirán, entregándoos a los tribunales y a la cárcel, y os harán comparecer ante gobernadores y reyes, por causa de mi nombre: así tendréis oportunidad de dar testimonio”. Y añade Jesús una lección de madurez y nobleza y altura de miras: “Haced propósito de no preparar vuestra defensa, porque yo os daré palabras y sabiduría a las que no podrá hacer frente ni contradecir ningún adversario vuestro”.
          No se queda Jesús es ese planteamiento que viene –por decirlo así- de fuera, de los enemigos, de los que están cargados de odio frente a la causa de Cristo. Todavía baja más a la arena de lo cotidiano: “Hasta vuestros padres, parientes, hermanos y amigos os traicionarán, y matarán a algunos de vosotros, y todos os odiarán por causa de mi nombre”. La descripción pone los pelos de punta. Pero no es una fantasía de Jesús o del evangelista. La historia contemporánea es una realidad fehaciente del “todos contra todos”, del “todos contra la Iglesia”, del intento de aplastar la voz y la vida de esa Iglesia.
          En medio de ese anuncio calamitoso (y real, que lo estamos viviendo y del que nos hemos de hacer conscientes), surge una palabra de vida y fortaleza. Dice Jesús, en la conclusión de todo eso: Pero ni un solo cabello de vuestra cabeza perecerá; con vuestra perseverancia salvaréis vuestras almas. Es lo que queda al final del túnel. Pero sin negar el túnel (que es el intento solapado de muchos). Esa zona de oscuridad, de sufrimiento, de traiciones de los más queridos, está ahí. Ya anunció que estarán el padre contra la hija, y la madre contra el hijo… Ya anunció ese fenómeno que parecía exagerado y que hoy se da con tanta facilidad en los hogares de raíces cristianas. Y donde dice eso, ¡qué puede decir de lo demás!

          Pues bien: ni un solo cabello de vuestras cabezas perecerá; con vuestra perseverancia salvaréis vuestras almas. Una vez más Jesús ha acabado creando; no se ha quedado en “la muerte”, Anuncia la esperanza de la vida. Y aunque “la muerte” es un hecho, la esperanza es la fuerza.

7 comentarios:

  1. En esta parte del Evangelio, San Lucas, justo después de explicar Jesús algunas señales que tienen que darse si o si en el mundo antes de su 2ª venida, escribe que el Señor les dijo a sus Apóstoles que habría grandes persecuciones contra sus seguidores.

    12 «Pero, antes de todo esto, os echarán mano y os perseguirán, entregándoos a las sinagogas y cárceles y llevándoos ante reyes y gobernadores por mi nombre;

    Este pasaje donde el evangelista habla de "sinagogas", no de tribunales, recuerda claramente a aquellas primeras persecuciones que narra el libro de los Hechos de los Apóstoles, donde vemos como los judíos perseguían a los cristianos de su propio pueblo. Cuando habla de cárceles, recuerda mucho a aquellas prisiones que tuvieron que soportar aquellos primeros hermanos nuestros.

    Jesús les está hablando a ellos, y el Evangelista escribe lo que Jesús habló, ha quedado escrito, y no deberíamos nosotros añadirle o quitarle.

    13 esto os sucederá para que deis testimonio.
    14 Proponed, pues, en vuestro corazón no preparar la defensa,
    15 porque yo os daré una elocuencia y una sabiduría a la que no podrán resistir ni contradecir todos vuestros adversarios.

    Dar testimonio significa aquí, ser matados como Jesús, es decir por causa de la fe. Así lo fueron muchos de aquellos hermanos nuestros que siguieron a la resurrección del Señor. Hoy sigue ocurriendo. Es prueba de que el Evangelio es verdadero y que Jesús decía la verdad. En cuanto a la frase "No preparéis vuestra defensa", se está refiriendo no a nuestra vida cotidiana, sino a aquellos momentos límite de la vida de un cristiano, que ha sido encarcelado o condenado a muerte. "No preparéis vuestra defensa". Cualquier otra explicación de esas palabras podría ser una manipulación del Evangelio para adaptarlo a otras situaciones según convenga en un momento u otro de la vida. Suele suceder a menudo, pero honestamente pienso que no es bueno hacer interpretaciones privadas. Probablemente Jesús hable cosas parecidas en otros momentos adaptados a otras circunstancias, pero ahí es lo que es y va dirigido a quien va dirigido.

    La elocuencia a la que se refiere Jesús y que van a recibir sus "testigos" es la asistencia directa del Espíritu Santo, tercera persona de la Trinidad. De nuevo, adaptado a ese momento límite de la vida. Otra interpretación puede ser un extra añadido libre.

    18 Pero no perecerá ni un cabello de vuestra cabeza.
    19 Con vuestra perseverancia salvaréis vuestras almas.

    La cabeza a la que se refiere no es evidentemente la del cuerpo, porque este va a ser muerto por los verdugos. Jesús anima así a los suyos a dar testimonio entregando su vida como El, porque así irán al cielo. "Con vuestra perseverancia" se está refiriendo al momento que está narrando el evangelista. La perseverancia es algo aplicable en otros momentos de la vida del cristiano, pero ahí está hablando de la perseverancia que lleva a la ejecución final de los condenados por ser cristianos.

    El catecismo de la Iglesia enseña que antes de la 2ª venida vendrá la última y más cruenta persecución de la Iglesia. Muchos santos de la Iglesia han hablado sobre esto, y algunos santos han tenido visiones sobre estos días. Diversas apariciones aprobadas por la Iglesia refuerzan esta creencia de que al final habrá una horrenda persecución contra los cristianos, y luego Cristo volverá.

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  2. Primer puesto9:36 a. m.

    El Papa dijo recientemente que el confesionario no es una cámara de tortura. Se engañarían a si mismos algunos hermanos nuestros sacerdotes si pensaran que eso no va con ellos. La misericordia no es sólo dar la absolución o consejos. La misericordia también pasa por el respeto al que peor se encuentra, el trato super amable con todos. Recuerdo ahora al Padre Pio, como se pasaba horas y horas en el confesionario y largas filas de gente acudían a el. Hay otros casos de sacerdotes que le han dado a la confesión el verdadero valor que tiene. El confesionario existe para perdonar pecados, no es un taller de psicología. Recuerdo a un sacerdote jesuita que siempre que me veía desde su confesionario me saludaba o me preguntaba como estata. Así dan ganas y no da yu yu. Mucha gente no confiesa por eso, porque parece que vas a la cámara de tortura y luego lo confirmas. Fue cámara de tortura. Sería muy recomendable que nuestros hermanos sacerdotes tomaran nota de las palabras del Santo Padre Francisco.

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  3. Anónimo1:32 p. m.

    Su meditación, padre ,como siempre para meditar y tomar medidas en nuestro camino hacia el encuentro definitivo con nuestro Señor.
    Lo demás,ni lo leo,porque me parece mucha letra y poco contenido.
    .

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  4. Ana Ciudad3:03 p. m.

    Estoy de acuerdo con el "anónimo".Alguiños comentarios son interminales, para a veces
    repetir lo que el padre ya ha explicado con absoluta claridad.
    Los comentarios , a mí entender deben ser positivos y exponer ideas claras..¿viene hoy a caso la historia de los confesionaríos?
    Jesús dice"No es el siervo mayor que su maestro".
    Aprendimos de lo que están preparados para enseñar.




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  5. Querido P. Cantero: Estoy, un día más, en "su Blog" de apormalaga, donde cada día también, usted nos dedica su tiempo y su saber como maestro de la Palabra de Dios. Nos quedamos con ese sentido último al que nos señala usted para la Palabra de Dios en esta semana última del año litúrgico: el camino oscuro de nuestro recorrido en esta vida y el desenlace final que nos ofrece el valor seguro de la esperanza cristiana.
    Menciono como mi clave hoy para entrar en el sentido de su homilía los dos últimos párrafos.
    ¡Dios sea siempre bendito y alabado!
    Saludos cordiales

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  6. Dejé para la tarde de hoy, otra parte del Evangelio del día:

    "Serán entregados hasta por sus propios padres y hermanos, por sus parientes y amigos; y a muchos de ustedes los matarán."
    Serán odiados por todos a causa de mi Nombre.

    ¿Que significa? Significa que dentro de las persecuciones anunciadas por Jesús se encuentra algo que puede resultar chocante y durísimo de digerir. Que serán los más cercanos los que llegarán a odiarte. ¿Y todo por qué? No por hacer nada malo, sino por el hecho de ser cristiano. Nada más. Estás palabras fueron dirigidas primero a los Apóstoles, y luego a la Primera generación de cristianos, y así sucesivamente. Hasta llegar a hoy, siguen vigentes como se puede comprobar a diario. Los vemos a diario. Lo vemos también hoy.

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  7. Anónimo6:50 p. m.

    Javier te felicito, porque a pesar de los dos comentarios llenos de desprecio que podrían ser contestados con razones, y a pesar de las ironías de otros, y de quien tiene que actuar no lo haga, has demostrado tu talla. Ellos deberían alegrarse, pero ya se ve que no. Gracias. Está claro que tu no tienes un problema con esto, a lo mejor son otros los que lo tienen. Así que tranquilo.

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