sábado, 14 de septiembre de 2013

Del día 13 de septiembre

Prometido, no cumplido
             Prometí –eso sí, cuanto me fuera posible- dejaros ayer una reseña siquiera del Evangelio del día. Luego no me rodaron las cosas como para poder hacerlo.
             La verdad que –cuando yo ayer oraba- no dejaba de pensar en los seguidores el blog. No sólo porque ésta es nuestra cita diaria, sino porque el texto era para no dejarlo pasar por alto: El ciego que guía a otro ciego es una de las  expresiones más clarificadoras para hacer el propio examen de conciencia. Somos muchos ciegos que pretendemos conducir a otros, a los que creemos ciegos o que realmente lo son.  El problema nace cuando el “conductor” que pretende conducir está ciego también.
             Pero Jesús lo borda. Porque es igualmente cierto que muchos “conductores” pretenden quitarle al cegato la paja que tiene en su ojo, siendo así que él mismo tiene una viga en el suyo. Enormemente expresivo (y según su estilo, exagerado para resaltar el hecho), habla Jesús de esos que critican, juzgan, opinan sobre la “paja” ajena, siendo así que ellos tienen UNA VIDA en su ojo que le impide ver. Y que –por tanto- lo que pretende ver con su ojo y juzgar por lo que ha medio visto, y criticar sin saber el todo… ¡Y todavía quieren corregir la paja del ojo ajeno!
             A mí me tuvo ayer un largo rato de oración esta explicación de Jesús. Yo invito a que seamos capaces de hacerlo. A que no lo hagamos de corrida…; que nos detengamos muy pausadamente.  Primero tendremos que comprender que NO VEMOS porque nuestra vida nos tapa el resto. Y segundo: desde la mala, parcial y por eso mismo incompleta, subjetiva visión nuestra, NO PODEMOS NI VER (ni mucho menos enjuiciar y querer corregir) la paja ajena.
             Jesús concluye que nos volvamos primero sobre nosotros mismos para quitar nuestra viga de nuestro ojo.  Luego vendrá la oportunidad de ofrecer la ayuda para quitar la paja del ojo del otro.  Claro que muchas veces, ni siquiera vamos a ver –entonces- esa supuesta paja que tanto veíamos… cuando no veíamos.
             Jesús es elocuente. Cuando se dice que no se entiende a Jesús es que no nos hemos parado a entenderlo. O que no queremos ahondar para así no tener que entenderlo… Porque si entendemos a Jesús y somos consecuentes, vamos a evitar muchas pifias.


Más abajo tenéis la oración y liturgia explicada de HOY 14

2 comentarios:

  1. Anónimo1:35 a. m.


    Usted nunca se equivoca...no doy crédito
    a lo que usted dice ;no vaya a engañarse a sí
    mismo. Que bueno que usted haga oración y la
    intensifique porque usted recibirá mucha luz ;
    para que usted vaya descubriendo al auténtico
    flautista de Amelín de "esta historia". No
    le haga hacer bailar al unísono y pierda
    usted el verdadero paso que lleva a la vida
    Eterna . Los acordes de la música no son
    precisamente divinos ni celestiales sino
    todo lo contrario mundanos..torcidos
    y manifiestamente engañosos .

    ResponderEliminar
  2. Ana Ciudad12:35 p. m.

    Te escondes bajo el anonimato,para escribir este comentario que a mi torpe entender está fuera de contesto.Yo personalmente Sí doy crédito a la oración de este sacerdote,pues siempre lo hace basándose en el EVANGELIO,que es la PALABRA VIVA y EFICAD.

    ResponderEliminar

¡GRACIAS POR COMENTAR!