domingo, 26 de mayo de 2013

El Misterio de los misterios

El próximo jueves, día 30
comienza LA NOVENA
al SAGRADO CORAZÓN,
en la Iglesia del Sagrado Corazón,
a las 6’45 de la tarde,
con Exposición, Rosario, Bendición,
y SANTA MISA con predicación

SANTÍSIMA TRINIDAD
             Realmente el misterio más alto de toda nuestra fe, al que podemos acercarnos de alguna manera pero nunca pretender comprenderlo. Podemos intentar explicaciones, figuras, comparaciones.  Pero el Misterio es el misterio, y no intentamos poseer su secreto último.  CREEMOS, porque así nos lo va mostrando la Sagrada Escritura, que Dios infinito y eterno se expresa en tres Personas, como una forma de ofrecernos más campo de expresión y conocimiento de su Divina Majestad. Pero que –en definitiva- estamos siempre hablando del DIOS ÚNICO, porque sólo puede haber UN DIOS.
             EL Ciclo litúrgico designado con la letra C no es el más explícito. Lo que expresa en la primera lectura es la eternidad de Dios. Porque al hablar de la Sabiduría, siempre va expresándola como anterior y pre-existente a cualquier otra realidad.  Cuando surge el globo de la Tierra, ya estaba antes la Sabiduría. Cuando se hizo la Creación, con sus montes, sus vegetales, sus animales, ya existía esa Sabiduría.  Lo que puede interpretarse de dos formas: ya existía Dios, que tiene esa Sabiduría, o llega a expresarse a Dios en esa SABIDURÍA que precede a todo, y que ha ido haciendo sabiamente el mundo entero.
             En la 2ª lectura San Pablo empieza diciendo que ya hemos recibido la gracia de poder estar en paz con Dios por medio de Jesucristo…, y acaba con la afirmación de que Dios ha derramado en nuestro corazones el Espíritu Santo, con lo cual nos está mostrando que Dios actúa en nosotros indistintamente desde una u otra de sus Divinas Personas.  Lo que con simplicidad puede decirse que Dios actúa en nosotros;  o que Cristo nos ha salvado, según el plan de Dios. O que el Espíritu Santo habita en nuestros corazones, como Dios que ha tomado posesión en nosotros y se ha establecido ahí, como en su propia casa.
             El Evangelio vuelve a esa misma realidad: Jesús, el Hijo, hace lo que le agrada al Padre. El Espíritu Santo no hace nada que no vea hacer al Hijo. Y al final queda que estamos bajo esa realidad trinitaria de Dios ÚNICO, que se expresa indistintamente por una u otra de sus divinas personas.

             ¿Cómo poner eso en lenguaje simple?  - Vivir en GRACIA DE DIOS es vivir en ese –ámbito en el que Dios es quien nos lleva. Cuanto podemos hablar de Dios, cuanto podemos intentar barruntar del Espíritu Santo, se nos ha puesto de manifiesto en Jesús, el Hijo de Dios que se hizo hombre y vivió entre la humanidad de su tiempo como un hombre cualquiera. Con eso podemos nosotros acercarnos mucho más a la verdad de Dios, porque Jesús nos lo pone delante en las propias obras, criterios, pensamientos, enseñanzas de Jesús.  Él ha estado aquí abajo, Él ha vivido el día a día de la vida humana. Él ha conocido nuestras debilidades y nuestras grandezas. Él ha podido poner ante nuestros ojos la grandeza del amor de Dios. Por eso la fe no tiene que complicarse pretendiendo comprender el misterio, sino centrarse en Jesús, en su Evangelio, que nos va desarrollando –en la propia vida de Jesús- todo el misterio de Dios, puesto a la altura de una realidad humana, como la que Él vivió.

             A la altura de una EUCARISTÍA en la que Él se viene a nosotros para ser dentro de nosotros una semilla que va desarrollando y desplegando nuestra fe.  Para ser un EVANGELIO vivo que nos va ampliando con gran pedagogía –adaptada a nuestras capacidades- quién y cómo es ese Dios Trinitario que vive en nosotros y va haciendo su obra en nosotros.  Al que hemos de ir respondiendo sin dejarnos anquilosar en modos y formas que ya se tienen, sino creciendo siempre porque Dios es SIEMPRE MÁS.

2 comentarios:

  1. Ana Ciudad11:04 a. m.

    La Santísima Trinidad es el punto de partida de toda verdad revelada y el misterio central de la Iglesia.La TRINIDAD BEATÍSIMA es continuamente invocada en toda la liturgia.Muchas veces a lo largo del día,repetimos lo cristianos:GLORIA AL PADRE,Y AL HIJO,Y AL ESPÍRITU SANTO.
    ¡Dios es mi Padre!Si lo meditamos no saldremos de esta consoladora condideración.
    ¡Jesús es mi Amigo entrañable!,que me quiere con toda la divina locura de su Corazón.
    !El Espíritu Santo es mi Consolador!,que me guía en el andar de todo mi camino.
    TÚ eres de Dios....y Dios es tuyo.

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  2. José Antonio1:30 p. m.

    Mi recuerdo en este día a esos/as "Centinelas de la Oración", a los que la Iglesia en este día de la Santísima Trinidad, recuerda en la Jornada Pro Orantibus. La Oración hecha Vida y la Vida hecha Oración. Gracias a todos esos monasterios (especialmente a mis Hermanas Cistercienses de Málaga) que son el pulmón de la Iglesia y que tanto bien nos hacen con su oración tan grata a los ojos de Dios.

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