domingo, 6 de octubre de 2013

Oración del pasado Primer Viernes

Sobre el pasado PRIMER VIERNES
             Varias personas me han pedido la ORACIÓN ANTE EL SANTÍSIMO que tuvimos el Primer Viernes.  Esa oración os la acompaño aquí en su original escrito.
             Pero si alguien deseara ESCUCHARLA tal cual, puedo también enviársela a través del Ordenador.


             Oración ante el Santísimo        [4.X.2013]

¡Corazón de Jesús!:

estamos comenzando un nuevo curso.
Ya es para dar gracias a Dios
para agradecerte, ¡Corazón de Jesús!, que:
-          nos has llamado a estar aquí
-          nos has dado vida para estar aquí
Te adoramos y te agradecemos

HOY, en la misa, podemos elegir lecturas por ser día de San Francisco de Asís.
·         si elegimos la lectura continuada nos encontramos con un acto de contrición de un profeta –Baruc- que reconoce la bondad de Dios que es misericordioso.

Porque -dice el profeta-:  si nos miramos a nosotros
+ Sentimos vergüenza porque del primero al último pecamos desagradando al Señor;
+ no seguimos sus deseos,
+ no hemos hecho caso,
+ no hemos obedecido a un Dios, que habló por sus profetas.

ACTUALICEMOS
¡Corazón de Jesús!:
*tú has hablado
*los Evangelios han recogido tu palabra
*tú has vivido una vida
*los evangelistas nos la han contado
*tú tienes unos sentimientos
*la oración en o con el Evangelio nos manifiesta tus detalles; nos muestra tu Corazón.

Ahora, digamos a Baruc y diríamos:
sentimos vergüenza todos    
porque aún no nos hemos metido en tu Corazón,  en tus hechos o tus palabras, meditadas, regustadas, contempladas, profundizadas…
por eso no nos metemos en tus sentimientos, no cambiamos actitudes conforme vamos mirando tu vida; no le hacemos caso porque siempre ponemos por delante nuestros gustos, conveniencias y amor propio…
no hemos obedecido a tu Corazón que salta a borbotones en los Evangelios.

Una pregunta nos hacemos
¿Hay realidades personales (sobre todo, aquellas que vemos que están defectuosas) que las estemos confrontando con el Evangelio.
            Analizar resultados en este período

¿Cambiamos alguna forma de pensar, juzgar, actuar…  porque en el Evangelio vemos que tú lo haces bien, o  enseñas de otra manera?
¿Sabríamos empezar por algún detalle -aunque sea pequeño- de modo que estrenemos curso con un objetivo para adelante?


Es evidente que nos cuesta salir de nuestros modos y plantearnos un paso nuevo, distinto.  ¡Estamos todos muy aferrados a “nuestras maneras”…!
No estamos en esa mentalidad que supone sacrificio, irme adaptando a tu modo de ser, sentir, querer…


Y sin embargo, lo que nos deja la lectura del día de San Francisco es:
-Dios me libre de gloriarme si no es en la cruz de nuestro Señor Jesucristo
Pensando en humano es un absurdo gloriarme en la cruz. En realidad (que es absurdo) es lo que piensa el mundo.
Pensando con pensamiento evangélico en la cruz de Cristo -buscando ir asumiendo el sacrificio- es como realmente se es feliz.
y como la paz y misericordia de Dios vienen sobre cada uno: “los que se ajustan a sus normas”…, sus deseos, sus enseñanzas…

Y San Pablo exclama: “que nadie venga a creerme necio por llevar yo en mi cuerpo las marcas de Jesús”.
Fueron precisamente esas “marcas” lo que físicamente experimento Francisco de Asís con los estigmas de las llagas de Jesús.

No llegamos a tanto
pero ¿no podríamos acercarnos un poco a un cierto espíritu de sacrificio, aunque suponga cruz para nosotros?
Son las marcas de Jesús en la vida diaria:
-          enfermedad
-          edad
-          limitaciones…

Y en otros campos más dependientes de nuestra voluntad:
·          situaciones de familia,
·         relaciones humanas,
·         necesidad de algún cambio en actuaciones propias,
·         sensibilidades y afectos,
·         corazón más abierto a otros
·         carácter hacia afuera
·         capacidad de sacrificio
·         saber callar

·         saber dudar de sí mismo

1 comentario:

  1. Ana Ciudad9:44 a. m.

    Gracias Padre por su oración,que hago mía, porque yo no se hablar tan maravillosamente bien con el Señor como lo hace usted.Cuando lo oía ,miraba a la Custodia y decía: Señor ,esa oración que sale del corazón del Padre quiero que sea mi oración .

    ResponderEliminar

¡GRACIAS POR COMENTAR!