viernes, 23 de septiembre de 2011

Día 23.- EL EVANGELIO DEL DÍA

Tantas veces leído, tantas veces escuchado que "nos lo sabemos de memoria". ¡Eso es lo malo! Me gustaría que se nos presentara Jesús a la vuelta de alguna esquina y nos hiciera esa pregunta: "¿Quién dicen los hombres que Yo soy?" Íbamos a poder decirle a Jesús la de novedades que se dicen de Él...: el mal famoso "Código da Vinci, por ejemplo. O, peor: lo que muchos "creyentes católicos" (¿¿??) dicen hoy de Jesús, creyendo que así lo hacen "más humano" hasta reducirlo a monigote o a sarcasmo.
- Y vosotros, ¿quién decís que soy Yo?, pregunta Jesús directamente a sus apóstoles. [¡Por favor, Pedro: cállate esta vez; deja que hablemos los demás y no lleves tú la voz cantante, por hermosa que sea!]. ¿Quién digo Yo que es Jesús? Palabritas no me van a faltar. Cosas bonitas me van a salir a borbotones. O quizás quejas,manipulaciones para dulcificar la exigencia, preguntas que surgen de una fe tan mía que no responde a lo que "revela el Padre del Cielo". Mis actitudes, mis actuaciones, mis reacciones, mis pensamientos, muchas formas mías están revelando que no voy a decir sinceramente: "Tú eres el Mesías de Dios". Es muy posible que se den otras respuestas. Y eso cada uno lo tiene que ver ahí dentro.
Pero como siempre será mejor darse la respuesta ante el mismo Jesús, con la honradez del que no pretende irse por las ramas de las buenas intenciones, o del "yo creo a mi manera", voy a ser yo quien ahora va a tener la valentía de preguntarle a Jesús: - Tú, Jesús, ¿QUIÉN DICES QUE SOY YO? Si somos sinceros, si no echamos un "estúpido velo", si sabemos tener un espíritu honrado de crítica constructiva, posiblemente vamos a escuchar de Jesús lo que escucchó Pedro: "El Hijo del hombre tiene que padecer mucho, ser desechado por los ancianos, sumos sacerdotes y doctores de leyes, ser ejecutado y resucitar al tercer día". Y esto no se queda en "historia". Jesús dirá "quién soy yo" desde el baremo de su propia vida personal: "quien quiera venir detrás de Mí..."

1 comentario:

  1. Anónimo10:49 a. m.

    Lectura del libro del profeta
    Ageo (1, 15—2, 9)

    El día veintiuno del séptimo mes del año segundo del reinado de Darío, la palabra del Señor vino, por medio del profeta Ageo, y dijo:
    “Diles a Zorobabel, hijo de Sealtiel, gobernador de Judea, y a Josué, hijo de Yosadac, sumo sacerdote, y al resto del pueblo:


    ¿Y QUIÉN SERÁ ESTE AGEO PROFETA DEL QUE HABLA LA PRIMERA LECTURA DE HOY? De momento me basta saber que habla en Nombre del Señor, por lo tanto Palabra de Dios, según nos enseña la Santa Madre Iglesia que es y que no es la Palabra de Dios. Hay nombres raros al principio, y desconocidos para mi en su mayoría, pero no importa. Yo podría ser uno de ellos, pero podría ser de los del "resto del pueblo" a quien se dirige la Palabra.

    Y DICE EL PROFETA:

    ‘¿Queda alguien entre ustedes que haya visto este templo en el esplendor que antes tenía? ¿Y qué es lo que ven ahora? ¿Acaso no es muy poca cosa a sus ojos?

    Y YO DIGO:

    YA SABEMOS QUE NOSOTROS SOMOS EL TEMPLO (1 COR 6,19). Una nueva llamada a nuestro examen interior. ¿Cómo nos vemos por dentro delante del Señor? Yo me veo como muy poca cosa. Efectivamente, el profeta ha dado en la diana. ¿Cómo te ves tu?

    PARA LOS QUE NO SE VEAN ASÍ, no hay Palabra, pero para los que se vean así, dice el PROFETA:


    Pues bien, ¡ánimo!, Zorobabel; ¡ánimo!, Josué, hijo de Yosadac, sumo sacerdote; ¡ánimo!, pueblo entero. ¡Manos a la obra!, porque yo estoy con ustedes, dice el Señor de los ejércitos.
    Conforme a la alianza que hice con ustedes, cuando salieron de Egipto, mi espíritu estará con ustedes. No teman’.


    EL SEÑOR NOS MANDA ÁNIMOS Y NOS ENCARGA PONERNOS MANOS A LA OBRA, ES DECIR, EN ACTITUD DE TRABAJAR POR SU REINO, Y ESO ES A CADA UNO DE NOSOTROS, SABIENDO QUE SU ESPÍRITU ESTARÁ CON NOSOTROS, Y QUE NO HAY NADA QUE TEMER. TENEMOS UNA GARANTÍA. DIOS NO MIENTE, Y SUS ALIANZAS SON VERDADERAS Y EJEMPLO TENEMOS EN LA BIBLIA.

    y finalmente un mensaje de esperanza que nos envía el Señor. Aunque el Templo esté en ruinas (cómo decía ayer), el lo levantará, siempre contando con nuestra libertad de ser verdaderamente suyo, sin hacernos una religión a la carta, y a nuestra conveniencia.

    ESTO DICE EL PROFETA:

    Esto dice el Señor de los ejércitos: ‘Dentro de poco tiempo conmoveré el cielo y la tierra, el mar y los continentes. Conmoveré a todos los pueblos para que vengan a traerme las riquezas de todas las naciones y llenaré de gloria este templo. Mía es la plata y mío es el oro. La gloria de este segundo templo será mayor que la del primero, y en este sitio daré yo la paz’,dice el Señor de los ejércitos”.
    Palabra de Dios.
    Te alabamos, Señor.


    O DICHO DE OTRA FORMA. AL FINAL DE TODO, A PESAR DE TODO, Y EN CONTRA DE TODO, EL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS, TRIUNFARÁ POR ENCIMA DE TODO, Y LOS SUYOS, LO VERÁN Y LO CONTEMPLARÁN.

    ResponderEliminar

¡GRACIAS POR COMENTAR!