Repasando el blog del APOSTOLADO, echo de menos los comentarios a lo que se va publicando. Y un blog sin entradas de comentarios (cuando teóricamente hay 12 seguidores), no puedo menos que extrañarme. Y me hago unas preguntas: ¿no interesa?; ¿no interesa lo que se dice?; ¿basta limitarse a leer?; ¿estamos asistiendo pasivamente?; ¿no tenemos nada que decir?
Pienso que sería interesante si nos aclaramos sobre estas cosas. O es que tiene poco gancho o es que vamos demasiados en el vagón de cola y hacemos poco por tirar, ayudar, dar vida.
Incluso sería muy bueno que cada uno enviáramos a gentes conocidas la dirección del blog, y lo implicáramos en este medio tan actual para estar en contacto.
Adelante, pues.
ORACION
ResponderEliminarAyúdame a hacer silencio, Señor, quiero escuchar tu voz. Toma mi mano,
guíame al desierto. Que nos encontremos a solas, Tú y yo.
Necesito contemplar tu rostro, me hace falta el calor de tu voz,
caminar juntos… callar, para que hables Tú.
Quiero revisar mi vida, descubrir en qué tengo que cambiar, afianzar
lo que anda bien, sorprenderme con lo nuevo que me pides.
Me pongo en tus manos, ayúdame a dejar a un lado las prisas, las
preocupaciones que llenan mi cabeza.
Barre mis dudas e inseguridades, quiero compartir mi vida y revisarla
a tu lado. Ver dónde aprieta el zapato para urgir el cambio.
Me tienta el activismo. Me tienta la seguridad, hay que hacer, hacer y
hacer. Y me olvido del silencio, dedico poco tiempo a la oración.
¿Leer tu Palabra en la Biblia?… para cuando haya tiempo.
Me tienta la incoherencia. Hablar mucho y hacer poco. Mostrar
apariencia de buen cristiano, pero dentro, donde sólo Tú y yo nos
conocemos, tenemos mucho que cambiar.
Me tienta ser el centro del mundo. Que los demás giren a mi alrededor.
Que me sirvan en lugar de servir. Me tienta la idolatría. Fabricarme
un ídolo con mis proyectos, mis convicciones, mis certezas y
conveniencias, y ponerle tu nombre de Dios.
Me tienta la falta de compromiso. Es más fácil pasar de largo que
bajarse del caballo y actuar como el buen samaritano. ¡Hay tantos
caídos a mi lado, Señor, y yo me hago el distraído!
Me tienta la falta de sensibilidad, no tener compasión, acostumbrarme
a que otros sufran y tener excusas, razones, explicaciones… que no
tienen nada de Evangelio pero que me conforman… un rato, Señor, porque
en el fondo no puedo engañarte.
Me tienta separar la fe y la vida. Leer el diario, ver las noticias
sin indignarme evangélicamente por la ausencia de justicia y la falta
de solidaridad.
Me tienta el mirar la realidad sin la mirada del Reino. Me tienta el
alejarme de la política, la economía, la participación social… que se
metan otros… yo, cristiano sólo el Domingo. Misa y gracias…
Me tienta el tener tiempo para todo menos para lo importante. La
familia, los hijos, la oración… al cuadragésimo lugar. Hay cosas más
importantes. ¿Las hay?
Me tienta, Señor, el desaliento, lo difícil que a veces se presentan
las cosas. Me tienta la desesperanza, la falta de utopía. Me tienta el
dejarlo para mañana, cuando hay que empezar a cambiar hoy.
Me tienta creer que te escucho cuando escucho mi voz. ¡Enséñame a
discernir! Dame luz para distinguir tu rostro.
Llévame al desierto de la oración, Señor, despójame de lo que me ata,
sacude mis certezas y pon a prueba mi amor. Para empezar de nuevo,
humilde, sencillo, con fuerza y Espíritu para vivir fiel a Ti. Amén.
A S. Moreno
ResponderEliminar¡BUENA APORTACIÓN!, DIGNA DE COPIARSE Y MEDITARSE Y DE TRASMITIRLA.
GRACIAS.
El blog acaba de superar las primeras 1.000 visitas. Gracias a todos, sin embargo, echamos de menos más participación, por ejemplo COMENTANDO. Para realizar un comentario sólo es preciso PINCHAR DONDE DICE "HAZ TU COMENTARIO".
ResponderEliminarSE echa de menos la publicaciones sobre las meditaciones del evangelio tales como "id a mi viña " y
ResponderEliminar"el reino de los cielos sufre violencia ",
Ojala se publiquen más .
7-4-2020. Pues si, querido Padre Cantero que ya estás con el Señor en el cielo. Tu queja era justa.
ResponderEliminar